domingo, 25 de octubre de 2009

ÁLAVA, TEBIÑO Y NAVARRA SE UNEN CONTRA LA RED DE ALTA TENSIÓN

Cien kilómetros en una sola voz

Todos los afectados por la red de alta tensión proyectada entre Castejón de Ebro y Vitoria defienden este fin de semana, junto a miles de aliados, la protección de la biodiversidad de sus pueblos. Y lo hacen desde la biodiversidad ideológica. Inédito.

Pero, ¿tú que es lo que quieres? ¿Dejar a tus hijos todos estos montes llenos de torres eléctricas y parques eólicos? ¿No preferirías que este paisaje se conservara como está para que tus hijos y nietos puedan seguir paseando como lo hacemos nosotros?". Ésa era la conversación que mantenían ayer dos jóvenes de alrededor de treinta años en Sáseta, poco antes de que comenzara el recorrido senderista que llevó a más de 300 personas desde esa localidad hasta Okina, camino de Vitoria, para mostrar su rechazo al proyecto de la línea de alta tensión que, de construirse, afectaría a Navarra, Trebiño y Álava.

En las protestas que se celebraron ayer, los participantes trataron de concienciar a quienes todavía no se han sumado al movimiento de la "grave situación" que ha creado Red Eléctrica Española con su empeño de llevar una larga autopista de cables por zonas protegidas desde un punto de vista medioambiental. Los actos fueron liderados por la Plataforma contra la Red de Alta Tensión y por la comisión No a la Alta Tensión, formada por los ayuntamientos de Arraia-Maeztu, Bernedo, Campezo, Lagrán, Peñacerrada, Valle de Arana, Treviño y Oion, en el territorio alavés; y por Aras, Aguilar, Azuelo, Meano, Espronceda, Marañón y Torralba del Río, ubicados en Navarra.

El eléctrico fin de semana comenzó ayer alrededor de las 9.00 horas, con la concentración en Sáseta de numerosas personas de los municipios mencionados, así como de otras localidades que se han adherido al movimiento. Por parte de la Diputación, acudieron a la marcha senderista el teniente diputado general, Claudio Rodríguez; la responsable foral de Agricultura, Estefanía Beltrán de Heredia; y el diputado de Medio Ambiente, Mikel Mintegui, quien acudió caminando desde Peñacerrada hasta Sáseta, al igual que hizo un poco más tarde un numeroso grupo de vecinos de esa localidad. Otras muchas personas dejaron sus vehículos en una explanada en Urarte, donde aguardaba un servicio de transporte organizado por la Cuadrilla de Montaña Alavesa, ya que en el punto de partida apenas había espacio para veinte turismos.

En Sáseta, la organización instaló una mesa de recogida de firmas y de venta de camisetas con el lema del movimiento. Hacia allí se fueron dirigiendo todos los participantes, muchos de ellos niños. Los más pequeños viajaron en mochilas a la espalda de sus padres, otros prefirieron sumarse a la caminata como cualquier adulto y hubo, incluso, quien realizó la travesía empujando un carrito de bebé. Ayer se necesitaban todas las voces y presencias en contra del macroproyecto.

Un plan del que Mikel Mintegui tuvo que hablar decenas de veces, cada vez que llegaba algún grupo. Muchas personas reconocieron no conocer el alcance de la iniciativa y se quedaron asombrados al saber el recorrido exacto que ha planteado Red Eléctrica. El diputado de Medio Ambiente tiene la poderosa sospechosa de que, al final, esta empresa pública dependiente del Ministerio de Industria se decantará por el trazado de Montaña Alavesa y Trebiño. Una idea que se fundamenta en que esa línea de alta tensión, además de traer la electricidad producida en tierras navarras, "recogerá la de los parques eólicos" construidos o por construir en la zona: Elgea, El Perdón, Alaiz y Codés, más los proyectados en Cruz de Alda e Iturrieta.

Esta suposición se apoya, además, en la reunión que el presidente de la Cuadrilla de Montaña Alavesa mantuvo con el delegado de Red Eléctrica Española en el País Vasco, quien recientemente aseguró a este periódico que el trazado que tiene más posibilidades es el que está ocasionando las protestas y que la decisión final la tomará este organismo o el Ministerio de Industria. En aquel encuentro, solicitado por José Ignacio Sáenz Castillo, el representante de la empresa pública "no aclaró nada y afirmó ser sólo un mandado de Madrid"". Otra gestión del presidente de la Cuadrilla con la consejera de Industria del Gobierno Vasco, sobre este tema se saldó con un "tengo que estudiar el tema, porque no lo conozco en profundidad", que dejó a Sáenz Castillo con la sensación de que se hará lo que diga Madrid.

Con estas decepciones sobre los hombros, los senderistas comenzaron a salir de Sáseta para hacer el recorrido del barranco que conduce hasta Okina, y desde allí a Vitoria para marchar en manifestación hacia el Gobierno Vasco para entregar su manifiesto y las firmas de los cargos electos en contra del plan.

hoy, actos en bernedo La segunda jornada de protestas se desarrollará hoy en Bernedo con una programación festiva y reivindicativa. Los asistentes a la convocatoria subirán primero a San Tirso para almorzar en el Bonete. A continuación, está previsto un recorrido guiado por la Ruta de las Carboneras-Caleras. La salida tendrá lugar a las once y media de la mañana y el recorrido dura aproximadamente una hora. En el transcurso del mismo, se podrá admirar el viejo oficio y las construcciones de anteriores generaciones que se dedicaron a la fabricación de la cal.

Para los más pequeños y para los que no quieran realizar esa ruta, la organización ha preparado un programa de actividades en Bernedo, que incluye castillos hinchables, animación musical, txosnas y la visita a una exposición con las características y afectaciones que va a suponer la autopista eléctrica. Asimismo, se han previsto al mediodía talleres medioambientales para mayores y chicos, un recital de bertsos en torno a este macroproyecto energéntico y la actuación del grupo de rock Sakeo, de la misma localidad.

Antes de comer, a la una de la tarde, tendrá lugar el acto central reivindicativo, ya que se procederá a la lectura de un manifiesto en contra del trazado que se baraja y la reclamación de que se lleve por otra zona que no afecte a espacios naturales protegidos.

La fiesta finalizará con el reparto de una paellada gigante para unas trescientas personas. Un broche sabroso a una celebración que, seguramente, no será la primera ni la última. El proyecto de instalar esta red de alta tensión ha provocado que personas de todos los colores sufran la misma indigestión. Y tienen claro que no pararán hasta sentir alivio.